Día 24: NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE PATRONA DE LOS NIÑOS POR NACER

Padre Paul Marx, Fundador de Human Life International

¿Quién se hubiera imaginado que desde una pequeña oficina en Washington D.C. en solo 15 años, surgiría Human Life International (HLI), la mayor organización provida y profamilia del mundo? ¿O quien se podría haber imaginado que en un período de tiempo similar un pueblo que estaba sumido en la superstición, los ritos paganos y los sangrientos sacrificios humanos, experimentaría semejante lluvia de gracias y se bautizarían más de nueve millones de personas?  “Lo que es imposible para el hombre, es posible para Dios.” Solo El puede haberlo imaginado y solo El podría llevarlo a cabo, a través de la  milagrosa intercesión de Nuestra Señora de Guadalupe.

Era obvio que había que elegir a Nuestra Señora de Guadalupe como Patrona. De todas las manifestaciones de la amorosa presencia de la Virgen María a través de los siglos, solo en esta se nos aparece embarazada. Tiene dentro de ella al Cristo por nacer y proclama la santidad de la vida del ser humano en el útero materno, así como  el hecho de que la vida humana es una bendición. Su reverencia y su ternura nos comunican a nosotros el gozo y la admiración, con los cuales debemos ver a cada vida humana por nacer. Al contemplar su simplicidad obtenemos la fuerza para emularla en su fe y proceder con confianza, sabiendo que Dios derribará  todos los aparentemente insuperables obstáculos que existen actualmente en el mundo.

Cuando María se apareció a san Juan Diego en 1531,  los fieles cristianos habían estado en México  por muy poco tiempo. El sacrificio humano, durante el cual la sangre de los niños a menudo era derramada para apaciguar a los sedientos demonios del viejo rito; todavía se practicaba a escondidas, continuando una larga y horrenda esclavitud  pagana en ese país. Nuestra Señora de Guadalupe trajo un mensaje de compasión a esta “caverna” de oscuridad e ignorancia. «Porque yo soy vuestra Madre misericordiosa, de ti, y de todos los hombres que viven unidos en esta tierra, y de todas las personas que me amen, los que me hablen, los que me busquen y los que en mí tienen confianza. Allí les escucharé sus lloros, su tristeza, para remediar, para curar todas sus diferentes penas, sus miserias, sus dolores.» Ya no tendría la gente que acudir aterrorizada a dioses sedientos de sangre, que exigían la muerte de sus hijos. Encontraron refugio bajo la benevolente protección de una tierna madre.

¡Cuánto la necesitamos! Cada vez en mayores números nuestra sociedad sacrifica a los niños y los ancianos en demoníacos altares, destruyéndolos a través del aborto, la educación sexual hedonista, la prostitución, la pornografía, el infanticio y la eutanasia; tontamente creyendo que mediante un poco más de anticonceptivos y otro programa más para el control de la población; seremos bendecidos con la felicidad y la paz que tanto deseamos.

Ante las tinieblas de nuestra era, nosotros aquí en HLI, clamamos por la asistencia y la protección de Nuestra Señora de Guadalupe. Su fe irradia la luz de Dios mismo, y su ejemplo nos revela la auténtica femineidad. Solo imitando el respeto de Nuestra Señora por la vida humana desde el momento de la concepción, podemos tener esperanzas de heredar la Vida misma. Bajo su tierna guía encontramos no solo abrigo y descanso, sino también confianza y fortaleza para hacer batalla en contra del mal. A través de su intercesión podemos esperar grandes milagros. Aunque fueron pocos en números, los primeros misioneros franciscanos en México lograron una cosecha de almas para Dios nunca vista en solo unos pocos años; bajo el patronato de la Virgen María. Aquí en HLI, al igual que David contra Goliat, nos mantenemos firmes en contra de un gran número de organizaciones antivida, gobiernos imperialistas y literalmente billones de dólares; y continuamos creciendo. Incontables niños han sido rescatados de la muerte; toda una generación que vivirá para alabar a Dios. Miles de almas han sido liberadas del miedo y la muerte y han abrazado la vida y el gozo. Las familias del mundo han aprendido a ver a HLI como una fuente de apoyo y estímulo, contra lo que el Santo Padre Juan Pablo II ha llamado “una cultura de muerte.”

En efecto, nuestros esfuerzos han tenido tanto éxito, que la Federación Internacional de Planificación de la Familia ( IPPF por sus siglas en inglés), promotora mundial del aborto, la anticoncepción y la esterilización, le ha llamado a HLI  su “principal enemigo.” HLI ha ayudado a lograr que se le retiren millones de dólares en fondos federales de programas de control de la población. Los “promotores de píldoras” alrededor del mundo, han aprendido a odiar el nombre Human Life International. HLI actualmente trabaja en 87 naciones mundialmente y todas sus organizaciones afiliadas aman a Nuestra Señora de Guadalupe. Ella es verdaderamente “la Madre de toda la humanidad” y los que trabajamos en el movimiento provida tenemos una especial devoción a ella y a su imagen. Aunque se le conoce como la “Reina de las Américas”, su influencia se ha extendido a todos los continentes a través  de los que trabajan en el movimiento provida, quienes  llevan el mensaje de amor y de vida a todas las naciones.

En el 1996 pusimos nuestra Sede Mundial bajo su protección. Localizada en Front Royal, Estado de Virginia, EEUU, tiene la forma de una cruz; como símbolo de que el sacrificio de Cristo en la cruz es el centro de nuestro trabajo. En el “corazón” del edificio está la Capilla de San Miguel Arcángel, en la cual tiene un lugar prominente Nuestra Señora de Guadalupe. Con la ayuda de su intercesión, llevamos a cabo nuestros programas para rescatar a los no nacidos, capacitar en el apoyo a la familia y llevar el Evangelio de la vida a todas las naciones.

La imagen milagrosa de la Virgen María que lleva a Jesús por nacer en su vientre, muestra mejor que las palabras, que los niños son literalmente el futuro de la familia, y la familia es la base sobre la cual se debe construir una sociedad  pacífica.  Este es el corazón de nuestra misión.

Solo a través del corazón de una Madre tan benevolente y poderosa, podemos tener esperanzas de lograr nuestros objetivos. Si los muchos años de viajes a través del mundo me han enseñado algo, es que siempre estamos en desventaja. La oposición siempre es más poderosa, tiene más fondos y el apoyo del gobierno y la prensa. Somos como un pequeño perrito enfrentándose a un abusador que tiene un palo en la mano. Pero la Virgen María nos asegura que no debemos preocuparnos ni tener miedo. Solo tenemos que pedir su intercesión y obtendremos la victoria, a pesar de que todo está en contra nuestra.

Nuestra Señora de Guadalupe se nos aparece como la Madre de Cristo, quien es cabeza de su Iglesia. Ella nos pide que acudamos a su Hijo y hagamos “lo El les diga”, para defender las enseñanzas de Su Cuerpo, la Iglesia Católica. Por lo tanto, promovemos y defendemos las enseñanzas de la Iglesia sin excepción, sin componendas. Sería una gran tontería hacer lo contrario. Una y otra vez he visto que a la vez que la sociedad acepta la contracepción, el aborto le sigue. La “pendiente resbalosa” será lo próximo. El aborto acarrea una gran falta de respeto por la vida humana y la sexualidad, y abre el camino a innumerables males: la pornografía, el abuso infantil, el infanticio y la eutanasia. Los católicos que antes eran fieles, comienzan a utilizar anticonceptivos y de pronto pierden su celo apostólico. La familia comienza a desintegrarse y la sociedad  a auto-destruirse.

Puede haber solo una solución: volver a ser fieles a las enseñanzas de Cristo y aceptar la paz y la libertad que El nos ofrece; especialmente a través de Su emisaria, Nuestra Señora de Guadalupe. Ella es el modelo de la virgen obediente, la persona fiel, la madre amorosa, la gentil esposa y la mujer caritativa. Sus virtudes ensalzan la Gracia de Dios, su obediencia Su sabiduría y sus milagros Su poder. Estamos en esta batalla hasta que Dios gane. No nos dejaremos amedrentar por la oposición, la interferencia de los gobiernos, lo que la sociedad considere que es “políticamente correcto” o las alianzas con el demonio. Como dijo san Pablo “Pelearemos la buena batalla.”

Con la ayuda de Nuestra Señora de Guadalupe, dedicamos nuestras vidas a trabajar para proteger toda vida humana y a las familias que traen nuevas vidas al mundo. El primer milagro de Jesús en Caná fue hecho para una familia, a petición de su madre la Virgen María. ¡Eso nos indica que estamos haciendo lo que debemos y que tenemos su bendición!  Más de 1500 años después en México, en medio de unas tinieblas que parecían impenetrables, ella brilló radiantemente como campeona de la familia; una mujer embarazada en contra de los horribles sacrificios humanos. Bajo el manto de Nuestra Señora de Guadalupe no solo sobreviviremos, sino que también prosperaremos. ¡Nuestra Señora de Guadalupe, ruega por nosotros!

Tomado del sitio web: vidahumana.org

 

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