JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO

Cristo Rey: Más allá del título

Cuando hablamos de Cristo Rey, no estamos simplemente refiriéndonos a un título honorífico. Estamos hablando de una realidad profunda: Jesús de Nazaret, el Hijo de Dios, es el Señor de la historia y de nuestros corazones. Su reinado es único y se caracteriza por:

* Un amor que supera todo: Su reino no se basa en el miedo o la fuerza, sino en el amor infinito que llevó a la cruz. Es un amor que transforma vidas y une a las personas.

* Una justicia que libera: Jesús proclama la buena nueva de la liberación para los oprimidos y la esperanza para los desesperanzados. Su justicia es una justicia restaurativa que busca la reconciliación.

* Una paz que trasciende: La paz que ofrece Cristo no es una simple ausencia de conflicto, sino una paz profunda que nace del corazón transformado por el Espíritu Santo.

¿Qué implica ser súbdito de este Rey? Ser súbdito de Cristo Rey implica:

* Renunciar a sí mismo: Seguir a Cristo significa negarse a sí mismo, tomar su cruz y seguirlo. Es un camino de conversión continua.

* Servir a los demás: Los seguidores de Cristo están llamados a servir a los demás, especialmente a los más necesitados. El servicio es el sello distintivo de los cristianos.

* Anunciar las buenas nuevas: Todos los bautizados somos llamados a ser misioneros, a compartir las buenas nuevas de la salvación con quienes nos rodean.

Cristo Rey en la vida cotidiana. La fe en Cristo Rey no es una realidad abstracta, sino que debe influir en nuestra vida cotidiana. Como cristianos, estamos llamados a:

* Buscar la justicia: Trabajar por un mundo más justo y equitativo, donde todos tengan las mismas oportunidades.

* Promover la paz: Construir relaciones basadas en el respeto, el diálogo y la comprensión mutua.

Mi reino no es de este mundo. Esta afirmación de Jesús ante Pilato es profunda y desafiante.

* Un reino espiritual: Jesús nos revela que su reino no es un reino terrenal con fronteras físicas o poder político. Es un reino espiritual, que se establece en los corazones de quienes lo aceptan.

* Un reino de verdad: Jesús es el camino, la verdad y la vida. Su reino se basa en la verdad, y quienes lo siguen buscan vivir en conformidad con esta verdad.

* Un reino de servicio: El servicio es la marca distintiva de los seguidores de Cristo. En lugar de buscar el poder y el dominio, los cristianos están llamados a servir a los demás.

¿Qué implica esto para nosotros hoy?

* Desafío a la cultura: Vivimos en un mundo que valora el éxito material, el poder y el placer. La afirmación de Jesús nos desafía a cuestionar estos valores y a buscar un sentido más profundo de la vida.

* Llamado a la conversión: Convertirse al reino de Cristo implica un cambio radical de perspectiva. Debemos renunciar a nuestros propios planes y deseos para seguir a Jesús.

* Misión de evangelizar: Como seguidores de Cristo, estamos llamados a compartir las buenas nuevas con los demás. Esto implica no solo hablar de Jesús, sino también vivir de acuerdo con sus enseñanzas.

¿A qué nos hace presente este evangelio?

* La importancia de la fe: Creer en el reino de Cristo es un acto de fe. Nos invita a confiar en lo que no podemos ver y a esperar en las promesas de Dios.

* La necesidad de la comunidad: El reino de Cristo se experimenta en comunidad. Necesitamos de otros creyentes para crecer en nuestra fe y para apoyarnos mutuamente.

* La esperanza en el futuro: Aunque el mundo esté lleno de sufrimiento y dolor, la esperanza cristiana nos asegura que el reino de Dios finalmente triunfará.

CRISTO REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES ruega por nosotros.

Dios es bueno.